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La ruptura de corazón es la enfermedad más común de nuestros tiempos, un virus que se esparce por todo tu cuerpo y te deja llena de heridas. Y lo peor es tan fuerte que es capaz de contagiar a otros inocentes si no están vacunados contra ella.

No es fácil olvidar a alguien con quien compartiste tu vida, tu cuerpo, tu alma. No es fácil sanar un corazón sin desangrarse, ojalá pudieras ponerte alcohol y una curita y seguir adelante. Por ello, acá te dejo algunos consejos que te servirán mucho más que esos 100 litros de helado que te comes para olvidar y las miles de cajas de Kleenex que han pasado por tu mesita de noche.

1. Llora. Llora mucho. Las lágrimas son necesarias para limpiar un corazón en reparación. Pero hazlo un par de días y luego seca las lágrimas, ponte bonita y a lo que sigue. No vivas con la tristeza a cuestas, hay un momento en el que debes empezar a ver el presente porque es lo único que tienes.

2. Acepta que tienes el corazón roto. Acéptalo y disfrútalo. Un corazón roto es muestra de un corazón vivo, significa que lo has intentado. Y es que el amor es tan bonito que, hasta cuando te das en la madre, se siente bien rico.
3. Agradece a aquél que se fue. Desde el fondo de tu corazón, dale las gracias a tu ex. No tienes que ir a verlo y remover las heridas, basta con que lo hagas en tu interior. Para ello, invéntate un ritual: prende una vela o escríbele una carta, pero dale las gracias por todo lo bueno y malo que te dio. Aunque no lo creas, te está haciendo una mujer más fuerte. La ruina es el principio de la reconstrucción y eso te acerca más a la mujer que quieres ser y al hombre con el que quieres estar.
4. Abrázalo. No, no vayas corriendo a abrazarlo. ¡Calma!. Pero cada que quieras mentársela, gritarle, decirle que lo extrañas, o llorar, cierra los ojos y abrázalo con todas tus fuerzas en tu corazón.. Bendecir te traerá bendiciones de regreso. Maldecir sólo le hará daño a tu corazón.
5. Un clavo no saca otro clavo. No uses el cuerpo o los sentimientos de otra persona para aliviar un corazón roto. No es justo ni honesto. Para que un corazón pueda amar de nuevo, deberá estar sano. De otra manera, terminarás contaminando tus heridas y dañando a alguien más en el proceso. Dicen que no hay que llenar los vacíos, hay que habilitar los espacios.

6. Confía en el universo. Esto también pasará. Tu ruptura es un paso más en el camino. Cuando sea su tiempo, será como tenga que ser, entonces podrás cerrar los ojos, rendirte y confiar. Sabrás que no hay nada que temer y, cuando llegue el momento, también conocerás a una persona que te abrazará tan fuerte que nunca recordarás haberte hecho añicos el corazón.

7. Despeja tu mente. Ocúpate. No te obsesiones, deja abierta tu mente para reconstruirte, para ser la mujer que siempre quisiste ser. Si dejas ir los malos pensamientos y cierras de una vez por todas esa puerta que jamás va a abrir, se abrirán otras puertas llenas del amor más grande que hayas podido conocer.

8. Suéltalo. Deja de atarte al pasado, rompe con los recuerdos. Hay que soltar para evolucionar, aunque duela. Dejar ir el pasado, es el primer paso para la felicidad. Date cuenta de que sólo son memorias de quien solías ser. Ahora deseas otra cosa, así que lo más importante es reconocerte y reconstruirte. Agárrate los ovarios y suelta el exceso de equipaje, eso te permitirá escoger qué llevar para tu siguiente viaje.

9. Perdona. No importa lo que te haya hecho la otra persona. Perdonarlo no le dará nada a él, pero a ti te hará una persona feliz, te quitará peso de encima y, sobre todo, disipará el odio en tu corazón

10. Sonríe. Quizás es de lo menos ganas tienes, pero la vida siempre te ha demostrado que lo que viene siempre es mejor que lo que tuviste. Deja de hacerte la víctima y sonríe lo más que puedas, ¡hasta tú misma te sorprenderás del poder de una sonrisa! Tu vida de soltera va a requerir muchas sonrisas.

Estoy segura de que, por hoy, los problemas (y tu ex) pueden esperar mientras tú te dedicas a ser feliz. Sé lo suficientemente atrevida para empezar a cambiar tu vida y no desangrar tu corazón en el camino.